viernes, 13 de septiembre de 2019

Reino Animalia




Reino animal




  1. ¿Qué es el reino animal?

El reino animal o animalia constituye, junto al reino vegetal, fungi, protistas y moneras, uno de los posibles en que la biología clasifica a las formas de vida conocida. Es uno de los grandes reinos tradicionales, a pesar de que la clasificación ha variado notoriamente a lo largo de más de 200 años de intentos de clasificación.
Las criaturas contenidas en este reino se llaman animales, y se caracterizan por tener una enorme diversidad ecológica, morfológica y conductual, ya que se hallan presentes a lo largo y ancho del planeta. Al mismo tiempo, se distinguen de los otros reinos eucariotas por carecer de clorofila (no hacen fotosíntesis) y pared celular (presente en células de plantas y hongos), así como por su reproducción casi enteramente sexual y su capacidad de movimiento autónomo y voluntario.
Al reino animal pertenecen alrededor de dos millones de especies distintas en todo el mundo, agrupados en varios taxones o filos, y en dos grandes categorías: vertebrados e invertebrados. En este reino, además, se clasifica también clasificado el ser humano.
Ver además: Célula Animal.
  1. Origen del reino animal

Los primeros animales del planeta aparecieron durante la llamada “explosión cámbrica” hace 540 millones de años, que consistió en una asombrosa diversificación y proliferación de la vida (especialmente de la vida pluricelular o metazoos) en los mares de la Tierra primitiva. Se ignoran los motivos que dispararon semejante “boom” evolutivo, pero algunos posibles responsables serían la proliferación de oxígeno fruto de la vida vegetal dominante, así como las presiones ejercidas por la actividad volcánica y geoquímica.
Las primeras especies animales fueron las esponjas de mar, algunas de las cuales podrían datar incluso desde hace 600 millones de años, según estudios en curso. Pero desde ese entonces los animales tienen una fuerte presencia en el registro fósil, a medida que proliferaron en los mares y luego en la tierra firme y por los aires.
  1. Características del reino animal

Las características fundamentales del reino animal pueden resumirse en las siguientes:
  • Son organismos eucariotas policelulares y tisulares. Esto significa que los cuerpos de los animales están conformados por tejidos que, a su vez, se componen de diversos tipos de células organizadas entre sí. Incluso los animales más pequeños poseen un cuerpo compuesto por numerosas células, y éstas son de tipo eucariótico: poseen un núcleo celular definido, en el que se halla contenida la información genética del individuo. Estas células carecen además de cloroplastos y de pared celular.
  • Son heterótrofos y de metabolismo aerobio. El metabolismo de los animales no puede producir su propio alimento como lo hacen las plantas, por lo que deben consumir materia orgánica proveniente de otros seres vivientes para sobrevivir. Dicha materia orgánica es digerida hasta obtener sus nutrientes esenciales y a partir de ella obtener glucosa, una molécula bioquímica que luego será oxidada para obtener la energía (ATP) que sostiene el cuerpo andando. Dicha oxidación se produce mediante la respiración: se toma el oxígeno del aire o del agua (según la especie) y se libera CO2.
  • Poseen movilidad propia. Este es uno de los principales rasgos distintivos de los animales: pueden desplazarse a voluntad, ya sea en agua, aire o tierra, empleando para ello extremidades especializadas: alas, aletas, patas, piernas. Gracias a ello pueden cambiar de hábitat y buscar uno más propicio, escapar de depredadores o perseguir a sus presas.
  • Poseen cuerpos simétricos. Los cuerpos de los animales pueden presentar dos tipos de simetría, es decir, que pueden ser divididos en dos mitades idénticas. La primera es la simetría bilateral (se divide el cuerpo de manera longitudinal) y la segunda es la simetría radial (se divide el cuerpo en base a su radio, ya que es circular).
  • Practican la reproducen sexual. Con algunas puntuales excepciones, en el caso de animales capaces de la partenogénesis, las especies animales se reproducen sexualmente, es decir, mediante la cópula de dos individuos de sexos opuestos (macho y hembra) y del intercambio de gametos o células sexuales dotadas de la mitad de la carga genética del individuo, y que además poseen tamaños y formas notoriamente diferentes.
  • Cuerpos estructurados por colágeno. A diferencia de otras formas de vida cuyos cuerpos se componen de celulosa principalmente, los animales tienen como proteína estructural el colágeno.
  1. Clasificación del reino animal

En principio, el reino animal puede clasificarse en dos grandes grupos: vertebrados (62.000 especies) e invertebrados (95% de las especies totales). Como su nombre lo indica, los vertebrados son aquellos que poseen un cráneo y una columna vertebral o espina dorsal, compuesta de vértebras; mientras que los invertebrados son aquellos que no poseen un esqueleto interno articulado.
Otras formas de clasificación atienden al hábitat específico de los animales, pudiendo distinguir entre animales marinos (del mar y los océanos), acuíferos (de agua dulce), terrestres (de la tierra firme), voladores (del aire), anfibios (de vida mixta entre agua y tierra), parasitarios (aquellos que viven dentro del cuerpo de otros) o urbanos (de la ciudad).
  1. Taxonomía del reino animal

El reino animal comprende una vasta cantidad de filos o grupos de especies que comparten una organización corporal bien definida, entre los que destacan:
  • Poríferos. Cerca de 9.000 especies de esponjas inmóviles, bentónicas y de cuerpos con poros inhalantes.
  • Cnidarios. Alrededor de 10.000 especies de animales acuáticos simples, primitivos, dotados de tentáculos urticantes y cuerpos en forma de saco.
  • Acantocéfalos. Un filo de 1.100 especies de gusanos parásitos, cuyos cuerpos oscilan entre pocos milímetros y 65 cm.
  • Anélidos. Alrededor de 16.700 especies de animales invertebrados de cuerpo de gusano, segmentado en anillos.
  • Artrópodos. Un gigantesco filo de más de 1.200.000 especies descritas de invertebrados dotados de exoesqueleto de quitina y extremidades articuladas, como los insectos, crustáceos, arácnidos y miriápodos. Son el filo más numeroso del reino.
  • Braquiópodos. Alrededor de 16.000 especies de animales marinos dotados de dos valvas o conchas, con las que protegen su cuerpo blando y semejante a los moluscos. Suelen ser inmóviles.
  • Briozoos. Un conjunto de hasta 5.700 especies de animales marinos (unos pocos son de agua dulce) que hacen vida fija y poseen una corona tentacular para captar alimento filtrando el agua.
  • Cordados. Alrededor de 65.000 especies de animales vertebrados, poseedores de una cuerda dorsal de células, de los que la mayoría son peces, pero que también abarca las aves, mamíferos y reptiles.
  • Equinodermos. Animales marinos y bentónicos, de los que se conocen unas 7.000 especies actuales, incluyen los erizos, estrellas de mar y semejantes.
  • Moluscos. Otro de los grandes filos del reino, comprende 100.000 especies vivientes de animales invertebrados, de cuerpo blando y hábitat principalmente acuático, entre los que están los pulpos, almejas, babosas, etc.
  • Nemátodos. Un filo de gusanos que abarca más de 25.000 especies, llamados comúnmente gusanos redondos o cilíndricos, y representan el 90% de la vida en el relieve oceánico.
  • Platelmintos. Los llamados “gusanos planos”, son unas 20.000 especies de animales hermafroditas de ambientes acuáticos o húmedos, muchas de las cuales llevan una vida parásita.
Faltaría aquí listar muchos otros filos de numerosas especies animales, cuyas diferencias pueden llegar a ser muy específicas.
Puede servirte: Taxonomía.
  1. Importancia del reino animal

El reino animal es uno de los más estudiados y de los primeros en formularse, ya que el interés del ser humano por los animales data desde tiempos antiguos. No solo como fuente de alimento, o de materias primas aprovechables, sino también como fuente de conocimiento biológico que permita darle respuesta a preguntas fundamentales sobre el origen de la vida, las dinámicas del cuerpo viviente o el mantenimiento del ciclo ecológico que permite un mundo diverso, vasto y hermoso.
  1. Ejemplos del reino animal

Algunos ejemplos sencillos del reino animal son:
  • Los animales domésticos: el perro, el gato, el hámster, los pájaros, los ratones.
  • Los insectos y artrópodos, desde las arañas, escorpiones y ciempiés, hasta los cangrejos, cochinillas de humedad, langostas y la enorme diversidad de insectos: mosquitos, moscas, escarabajos, mantis, cucarachas, abejas, etc.
  • Animales marinos como peces, delfines, lobos de mar, ballenas, tiburones, mejillones, erizos, estrellas de mar, pero también otros más simples como el zooplancton, las medusas, etc.
  • Los gusanos en su enorme variedad: los parásitos intestinales, las lombrices de tierra, los gusanos rastreros, etc.

Referencias:



Fuente: https://concepto.de/reino-animal/#ixzz5zSKN6vJj

Reino Plantae

REINO PLANTAE
Se llama Reino plantae (del latín “plantas”) o Reino vegetal a uno de los principales grupos en que la biología clasifica a los seres vivos conocidos. Junto con el Reino animal (animalia), el Reino de los hongos (fungi), el Reino protista (protistae) y el Reino moneras (monera), constituyen las categorías tradicionales de clasificación de la vida.
El reino vegetal es de los más antiguos que el ser humano ha estudiado, a pesar de que no exista un criterio estricto y universal respecto a qué considerar como una planta y qué no. En líneas generales se considera de este grupo a todas las formas de vida vegetal terrestre (árboles, arbustos, hierba, etc.) y a todas las algas acuáticas, siempre y cuando lleven a cabo alguna forma de nutrición fotosintética.
Los miembros de este reino descienden, en teoría, de un grupo de seres vivos llamados Primoplantae o Archaeplastida: los primeros eucariotas capaces de realizar la fotosíntesis, y cuya aparición en la Tierra primitiva se estima hace unos 1.200 millones de años, durante el Eón Proterozoico.
Ver además: Célula Eucariota.
  1. Características del Reino plantae

Los individuos del reino vegetal comparten las siguientes características fundamentales:
  • Pared celular y cloroplastos. Las células de las plantas poseen depósitos de clorofila conocidos como cloroplastos, lo cual les confiere su color verde y es indispensable para llevar a cabo la fotosíntesis. Además, sus células tienen una pared celular rígida y por fuera de la membrana plasmática, que les confiere resistencia estructural pero condiciona su crecimiento.
  • Carecen de movilidad. Las plantas, incluso las acuáticas, carecen de movilidad propia, es decir, son inmóviles. Se pueden desplazar como consecuencia de agentes naturales como el agua o el viento, en algunos casos, y disponen también de una orientación mínima de sus cuerpos que les permite buscar de manera activa el sol, conocida como fototropismo positivo, pero no pueden desplazarse de un hábitat a otro, ni huir de los animales que las consumen como alimento.
  • Cuerpos compuestos por celulosa. La celulosa es un tipo de biopolímero incoloro, inodoro, amorfo e insoluble en agua, alcohol y éter, que constituye el material básico de construcción de los cuerpos de las plantas y de algunos protistas.
  1. Clasificación del reino plantae

Los integrantes de este reino pueden clasificarse en dos subreinos:
  • Biliphytas. Se trata de un conjunto de algas dotadas de pigmentos solubles al agua que les sirven para captar la luz solar, tal y como hacen las cianobacterias. A su vez se divide en dos divisiones o filos:
    • Glaucofitas. Unas 13 especies de algas unicelulares de agua dulce, que a menudo se consideran pertenecientes al reino protista.
    • Rodofitas. Alrededor de 7.000 especies de algas rojas.
  • Clorobiotas. También llamadas Viridiplantae o simplemente plantas verdes, en donde están las algas verdes y las plantas terrestres de todo tipo, por lo que se incluyen aquí más de 300.000 especies distintas. Se divide a su vez en dos infrarreinos:
    • Clorophytas. Contiene unas 8.200 especies de algas verdes, tanto unicelulares como pluricelulares.
    • Streptophytas. Contiene el conjunto total de las plantas terrestres en su enorme variedad de hábitats, morfologías, patrones de crecimiento y mecanismos de defensa, así como las algas que más próximas le son evolutivamente: las llamadas carofitas.
  1. Nutrición del plantae

Reino plantae
Los miembros del Reino vegetal son todos autótrofos, o sea, capaces de generar su propio alimento a partir de materia inorgánica. Esto es llevado a cabo a través de la síntesis de la luz solar o fotosíntesis, y la absorción de recursos inorgánicos cercanos: agua, minerales y otros elementos, a través de las raíces. Entonces se lleva a cabo una reacción química energética, que requiere del CO2 atmosférico, del agua y de la luz solar como fuente de energía, para producir moléculas complejas de glucosa, que luego sirven para la respiración celular, es decir, para su oxidación y obtención de energía química o ATP. Este proceso subproduce moléculas de oxígeno que se liberan al aire, y responde a la fórmula general de: H2O → 2H+ + 2e- + ½ O2.
Existen, también, ciertas plantas capaces de alimentarse de la materia orgánica de otros seres vivos, como las célebres plantas “carnívoras”, que luego de atraer y capturar a los insectos, procede a digerirlos para aprovechar sus nutrientes.
  1. Reproducción del reino plantae

Las plantas se reproducen de dos modos muy distintos, el sexual y el asexual, dependiendo de su especie y en ocasiones de las condiciones ambientales en que cada individuo se encuentre.
  • Reproducción sexual o polinización. Ocurre gracias a la acción del viento o de insectos y otros animales, que llevan sin saberlo el polvillo o polen generado por las flores de las plantas, equivalentes a sus órganos sexuales, directo hacia los pistilos de alguna otra, facilitando así el intercambio de material genético. Las flores son entonces fecundadas y dan pie a un fruto, en cuyo interior hay semillas: embriones de un nuevo individuo con un genoma distinto al paterno. El fruto madura y cae, oo es comido por animales, y sus semillas se esparcen. Cada una tocará la tierra y germinará, produciendo una planta nueva.
  • Reproducción asexual o rizomática. No involucra la polinización, ni flores, sino otras partes invisibles de la planta como sus raíces, estolones o rizomas. Estas partes crecen a medida que la planta ha alcanzado la madurez y reúne los nutrientes necesarios para reproducirse, gestando así un individuo idéntico genéticamente al anterior, pero joven, que a menudo se halla ligado físicamente al progenitor durante un tiempo.
  1. Importancia del Reino plantae

La vida vegetal es el sostén de la mayoría de los organismos del mundo, y no sólo por encargarse de la producción del oxígeno que respiramos y servirnos de alimento en forma de frutas, hojas, tallos, tubérculos, etc. Las plantas también ayudan a controlar los gases de efecto invernadero dispersos en la atmósfera, como el CO2, y a absorber el agua en los diversos tipos de suelo, impidiendo su acumulación descontrolada. Sin la vida vegetal, el mundo no sería lo que es, y por esa misma razón es tan importante mantener su variedad, presencia y abundancia.
  1. Ejemplos del Reino plantae

Reino plantae
Los ejemplos de plantas en la vida cotidiana son fáciles de hallar. En este reino ingresan tanto los árboles, el césped, los yerbajos y los arbustos que hallamos en cualquier plaza o parque público, así como los helechos caseros y las plantas de agua que empleamos como decoración hogareña. También las algas marinas o lacustres, las palmeras de la playa, o los cactos y cardos de los desiertos.
  1. Botánica

La rama de las ciencias biológicas dedicada al estudio de las plantas se conoce como botánica y a sus practicantes como botánicos. Y así como los zoólogos estudian los animales en sus distintos aspectos, los botánicos se centran en el entendimiento de las relaciones entre plantas o entre plantas y animales, además de las dinámicas internas del organismo vegetal, y de la particular evolución que dio pie al surgimiento de este reino de criaturas.


Fuente: https://concepto.de/reino-plantae/#ixzz5zSIxqpJi

Protistas




Reino protista

  1. ¿Qué es el reino protista?

Se entiende por reino protista, también llamado protoctista, a uno de los grupos en que la biología clasifica los seres vivos, más específicamente los eucariotas, junto con el reino animalvegetal y fungi: se denomina protistas a todos aquellos eucariotas que no pueden ser clasificados ni como animales, plantas u hongos.
El reino protista es un grupo parafilétio (no contienen a todos los descendientes de un antepasado común) y agrupa a un conjunto muy diverso de organismos generalmente monocelulares, tanto autótrofos como heterótrofos. Dicha variedad hace que sea difícil caracterizarlos, excepto en los rasgos comunes de todo ser eucariótico, o sea, poseedor de células con un núcleo celular definido.
La existencia de un reino protista fue propuesta en 1969 en la teoría de los cinco reinos de la vida, pero actualmente se considera un término en desuso, y se tiende a clasificar a sus miembros integrantes dentro de las demás ramas de la vida eucariótica.
La palabra protista proviene del griego y significa “primordiales” o “primeros de los primeros”. Protoctista, similarmente, traduce “primeras criaturas”.
Ver además: Reino Monera.
  1. Características de los protistas

Al no ser un grupo monofilético, o sea, que comparte una historia evolutiva, los integrantes del reino protista no poseen rasgos comunes fundamentales con los cuales caracterizarlos, como no sean los propios de la vida eucariótica: los mismos que pueden presentar plantas, hongos y animales, pero en la clasificación biológica que les atribuye el estatus de reino (la de Robert Whittaker de 1969), su condición fundamental sería la de ser “organismos eucariotas unicelulares o unicelulares-coloniales, que no conforman ningún tipo de tejidos”.
Así, excepto su relativa simpleza evolutiva, no hay demasiado en común entre las distintas formas de protistas, y presentan distintos modelos de nutrición, reproducción, locomoción y estructuras celulares.
  1. Clasificación de los protistas

El reino de los protistas tradicionalmente se divide en supergrupos muy distintos entre sí, de la siguiente manera:
  • Archaeplastida o Primoplantae. Contiene las algas verdes y rojas más primitivas, precursoras de la vida vegetal, sobre todo la terrestre. Por esta razón muchos las incluyen hoy en día dentro del reino plantae.
  • Stramenophiles o Heterokonta. Algas de distintos tipos, desde unicelulares a pluricelulares, así como otros protistas saprófitos o parásitos que carecen de clorofila, pero se asemejan a los mohos, puesto que habrían perdido evolutivamente su clorofila.
  • Alveolata. Organismos acuáticos con y sin clorofila, de vida parásita en algunos casos, pero que presentan en todo caso alvéolos corticales (de ahí el nombre), vesículas que forman una película flexible apoyando la membrana plasmática.
  • Rhizaria. Diversos organismos de tipo ameboide o flagelado, con o sin clorofila, como amebas filosas o mohos mucosos.
  • Excavata. Organismos antiguamente clasificados como flagelados, que poseen un surco central de alimentación, siendo así heterótrofos, aunque muchos pueden presentar clorofila como consecuencia de endosimbiosis con algas verdes. La clasificación de este grupo es materia de debate.
  • Amoebozoa. Un poblado grupo de amibas y ameboides, caracterizados por formar pseudópodos (“dedos”) con sus citoplasmas. Algunos pueden ser multinucleados y otros agrupaciones pre-multicelulares (dictiostélidos).
  • Opisthokonta. Diversos protistas que habrían dado origen a los reinos de animalia y fungi, dotados de un flagelo ubicado en una posición posterior a la del movimiento celular (opistoconto).
  1. Nutrición de los protistas





Reino protista

Los protistas pueden poseer metabolismos autótrofos o heterótrofos, dependiendo de si poseen cloroplastos (clorofila) para llevar a cabo la fotosíntesis, o si en cambio carecen de ellos y deben alimentarse de la materia orgánica circundante (mediante la ósmosis o la ingestión o fagocitosis).
Muchos de ellos poseen amos mecanismos de nutrición de manera simultánea, y algunos de ellos llevan una existencia parásita, introduciéndose en organismos pluricelulares y alimentándose de ellos, causando enfermedades.
Sin embargo, los protistas son originalmente aerobios (emplean el oxígeno para sus procesos metabólicos), con excepción de aquellos que evolucionaron para vivir en ambientes en los que dicho elemento escasea.
  1. Reproducción de los protistas

La reproducción de los protistas puede ser tanto sexual como asexual, y en ocasiones una misma especie puede alternar entre un modelo y otro, de acuerdo a las condiciones del medio ambienteLa reproducción sexual se da mediante la generación de gametos y la fusión celular, mientras que la asexual se da por fisión celular y mitosis. En ningún caso se producen embriones.
  1. Importancia de los protistas





Reino protista

Los protistas son un grupo diverso y difícil de compartimentar, pero fundamental para el surgimiento de la vida tal y como la conocemos. Fueron los primeros organismos eucarióticos en surgir en los mares primitivos de la Tierra, y a partir de ellos la vida tomó diversos rumbos evolutivos que producirían los distintos reinos de eucariontes: plantas, animales y hongos.
De este modo, los protistas constituyen un peldaño previo y relativamente común a todas estas formas de vida eucariótica, incluida la humana, y su estudio es también el estudio de la eucariogénesis, o la aparición del núcleo celular en la historia evolutiva de los procariotas primitivos.
  1. Ejemplos de protistas





Reino protista

Algunos protistas bien conocidos son los siguientes:
  • Paramecios. Organismos unicelulares ciliados y de vida libre, abundantes en las aguas estancadas y charcos, y es quizá uno de los protistas más y mejor estudiados del mundo.
  • Amebas. Llamadas amibas o amebas, son protistas unicelulares que se desplazan y se alimentan mediante la generación de pseudópos o “dedos” con su citoplasma, lo cual les otorga una forma cambiante y dispersa. Pueden ser de vida libre o de vida parásita.
  • Plasmodios. Un género de protistas parásitos del cual se conocen hasta 175 especies, que se transmiten a huéspedes vertebrados mediante la picadura de un mosquito infectado. Es el causante de la enfermedad conocida como malaria o paludismo.
  • Glaucofitas. Algas unicelulares de agua dulce, de las que se conocen unas 13 especies, y que a ratos se incluyen entre las plantas. Generalmente se componen como células individuales, pero también pueden compartir la pared celular de su progenitora, ya que su reproducción es siempre asexual.
  • Coanozoos. Este grupo de protistas está vinculado con los animales y los hongos, constituyendo una especie de peldaño intermedio entre estos dos grupos de eucariontes. Puede dividirse en holomycota (semejantes a los hongos) y holozoa (semejantes a los animales).

Referencias:



Fuente: https://concepto.de/reino-protista/#ixzz5zKz6BxiM

Bacterias


Las Bacterias 

Las bacterias son organismos unicelulares procariontes, esto quiere decir que están formados por una sola célula carente de núcleo. Su ácido desoxirribonucleico (ADN) se encuentra libre en el citoplasma y no tienen organelos, como las mitocondrias, cloroplastos o aparato de Golgi. A pesar de su sencilla organización celular, cuentan con una pared celular (capa de polisacáridos) que envuelve la célula proporcionándole rigidez y protección. Son tan pequeñas que es imposible verlas a simple vista, solamente cuando llegan a agruparse formando colonias es cuando las podemos reconocer.

Imagen: Escherichia coli,
aumentada 25.000 veces. Wikipedia

Además de contar con una pared celular, cuando las condiciones ambientales se tornan hostiles muchas bacterias forman en su interior estructuras de protección llamadas endosporas, las cuales contienen el material genético y las sustancias necesarias para poder sobrevivir. Algunas son tan resistentes que permiten a la bacteria sobrevivir a altas temperaturas e incluso a largos periodos de tiempo.

Se reproducen asexualmente por medio de una forma de división celular denominada fisión binaria, que produce copias genéticamente idénticas a la célula original. En condiciones ideales, algunas bacterias se duplican en cuestión de minutos por lo que podrían en principio, dar origen a una población de millones de bacterias en poco tiempo.

Son prácticamente omnipresentes ya que habitan casi todos los hábitats de la Tierra, los científicos las consideran como los seres más numerosos del planeta. Una de las razones por las cuales son tan exitosas es porque pueden utilizar una amplia variedad de fuentes de alimento. Algunas bacterias llevan a cabo la fotosíntesis, proceso mediante el cual utilizan la energía lumínica y el dióxido de carbono para sintetizar su alimento (autótrofas), algo parecido a lo que realizan las plantas. Otras obtienen su energía de moléculas inorgánicas como azufre, amoniaco o nitritos (quimiolitótrofas) y algunas más se alimentan de la materia orgánica en descomposición (quimioorganótrofas).
Las bacterias desempeñan funciones que son importantes para otras formas de vida. Muchas son endosimbiontes, esto quiere decir que viven dentro de otros organismos o en estrecha asociación con ellos. Por ejemplo, existen bacterias que habitan en el tracto digestivo de los animales, incluyendo el ser humano, y les ayudan a procesar los nutrimentos que por sí solos serían incapaces de digerir.
A pesar de las ventajas que obtenemos de las bacterias, principalmente en la obtención de alimentos, medicamentos e inclusive en la industria, muchas son causante de enfermedades, algunas con importantes repercusiones en la historia humana. Por ejemplo, la “peste bubónica” en la cual murieron 100 millones de personas en Europa en el siglo XIV, fue causada por una bacteria.
Imagen: Micrografía electrónica con colores realzados que muestra a la especie Salmonella typhimurium (células rojas) invadiendo células humanas en cultivo. (Wikipedia)

Reino Fungí

  1. ¿Qué es el reino fungí?

El reino fungi es uno de los grupos en que la biología clasifica a las formas de vida conocida. Está compuesto por más de 144.000 especies diferentes de hongos entre los que figuran las levaduras, los mohos y las setas, y que comparten características fundamentales como la inmovilidad, la alimentación heterótrofa y ciertas estructuras celulares.
Los hongos existen a lo largo y ancho del mundo y en distintos hábitats, apareciendo en distintas formas y presentaciones: la idea tradicional que tenemos de ellos es la seta, con capuchón y cuerpo blanco alargado, pero esa es apenas una de las numerosas especies conocidas dentro del reino fungi.
De la totalidad de los hongos que habitan nuestro planeta, tan sólo un 5% ha sido estudiado y clasificado, y se estima que existan alrededor de 1,5 millones de especies aún desconocidas. Esto en parte se debe a que antiguamente los hongos eran clasificados como un tipo de planta, hasta que en el siglo XIX se empezó a distinguirlos como un reino biológico aparte.
La ciencia que se especializa en los miembros del reino fungi se llama micología.
Ver además: Reino Plantae.
  1. Características del reino fungi



Reino fungi - hongo
Los miembros del reino fungi comparten las siguientes características fundamentales:

  • Carecen de movilidad propia. Los hongos crecen en el suelo, en las superficies, o sobre troncos o materia orgánica en descomposición, dependiendo de sus preferencias, pero así como las plantas, se mantienen toda su vida en el mismo lugar, incapaces de moverse a voluntad.
  • Poseen pared celular. Las células de los hongos son eucariotas, es decir, con núcleo celular definido, y poseen una pared celular rígida, semejante a la de las células vegetales, pero en lugar de estar compuesta de celulosa, en los hongos está compuesta de quitina, la misma sustancia que otorga a los insectos la dureza de sus exoesqueletos. Además, son células alargadas y que pueden contener varios núcleos, poseen vacuolas pero no cloroplastos, pues no hacen fotosíntesis.
  • Crecen como hifas. El crecimiento de los hongos se produce a manera de hifas, estructuras cilíndricas y uniformes que pueden ir de los pocos micrómetros a los varios centímetros de longitud, pudiendo superponerse en un proceso de ramificación o bifurcación.
  1. Clasificación del reino fungi

La clasificación de los hongos se ha reelaborado a lo largo de la historia de la biología, a medida que se desarrollan mejores técnicas de reconocimiento y se distinguen a los hongos de otras formas de vida protistas y cromistas que se les asemejan. La clasificación actual del reino es la siguiente:
  • Hongos basidiomicetos (Basidiomycota). Aquellos que desarrollan setas (basidicarpos), de las cuales nacen las esporas reproductivas del hongo.
  • Hongos ascomicetos (Ascomycota). Aquellos que en lugar de setas tienen ascas, células sexuales productoras de esporas.
  • Hongos glomeromicetos (Glomeromycota). Micorrizas, o sea, uniones simbióticas entre un hongo y las raíces de una planta, en la que el primero otorga nutrientes y agua, y las segundas carbohidratos y vitaminas que no puede sintetizar.
  • Hongos zigomicetos (Zygomycota). Mohos que forman zigosporas, es decir, esporas capaces de soportar condiciones adversas durante mucho tiempo hasta que finalmente puedan germinar.
  • Hongos quitridiomicetos (Chytridiomycota). Aquellos hongos microscópicos y primitivos, generalmente acuáticos, que se reproducen por esporas flageladas (zoosporas).
  1. Nutrición del reino fungi



Reino fungi - hongos
La nutrición de los hongos es siempre heterótrofa, o sea, no pueden generar como las plantas su propio alimento, sino que deben descomponer la materia orgánica proveniente de otras formas de vida vegetal o animal. Dependiendo de cómo lo hagan, podemos hablar de:

  • Hongos saprófitos. Se nutren de la descomposición de materia orgánica de desecho, ya sea específica o no, es decir, de cierto tipo exclusivo de materia orgánica o de cualquiera en general.
  • Micorrizógenos. Se nutren mediante una relación simbiótica con las plantas, colonizando sus raíces e intercambiando con ellas diferentes nutrientes minerales y agua, generados por el hongo, a cambio de carbohidratos y vitaminas que el hongo es incapaz de sintetizar por su cuenta. Esto se conoce como micorriza.
  • Liquenizados. Se nutren a través de relaciones simbióticas producto de la unión del hongo y un alga o cianobacteria, estableciendo una relación tan estrecha que pueden considerarse un mismo individuo. Son semejantes a la micorriza.
  • Parásitos. Se nutren directamente del cuerpo de otros seres vivos, ya sea establecidos en su superficie o colonizando en interior de su cuerpo, causándoles daños diversos que pueden ser leves o incluso letales.
  1. Reproducción del reino fungi

Los hongos se reproducen de modo sexual y asexual, siempre a través de la producción de esporas. Éstas son equivalentes a las semillas de los árboles: formas resistentes al medio ambiente que, cuando se dan finalmente las condiciones óptimas, germinan y crean un nuevo ejemplar del hongo. El crecimiento de las hifas una vez germinadas las esporas puede ser muy rápida, pudiendo en algunos casos a verse a simple vista (un hongo tropical crece unos 5mm por minuto).
Las esporas se forman como parte última de procesos de reproducción asexual (mitosis) o sexual (meiosis), dependiendo de si el hongo requiere de esparcirse rápidamente, para lo cual es preferible la replicación asexual, o si requiere de variación genética, para lo cual requerirá del intercambio de material genético con otros individuos de la misma especie.
  1. Importancia del reino fungi



Reino fungi - hongo - champiñones
Los hongos llevan a cabo un importante rol ecológico en sus diversos nichos de aparición, ayudando a la descomposición y reciclaje de la materia orgánica, como animales o plantas muertos, defecaciones, hojas secas y caídas, troncos de árboles derribados, etc., junto con las bacterias y ciertas especies de insectos.

Por otro lado, muchas especies de hongos son útiles al ser humano, ya sea como especies comestibles, como es el champiñón, o como especies decorativas en la jardinería. También habría que destacar la importancia de las levaduras en los procesos de elaboración de cerveza, pan y otros productos, en los que juegan un rol vital en la transformación bioquímica de las sustancias.
  1. Hongos tóxicos o venenosos

Existen especies de hongos que segregan toxinas peligrosas, algunos incluso pudiendo ser letales si ingeridos, o si se respiran durante mucho rato sus esporas. Estas enzimas tóxicas pueden inducir en el ser humano o en otros animales condiciones como la taquicardia, vómitos, cólicos, sudor frío, sed, excreciones sanguinolentas o incluso la descompensación de la presión arterial, dependiendo de la cantidad consumida. Estos efectos pueden llegar, sin tratamiento, a causar daños necróticos en el hígado y los riñones, pudiendo ocasionar la muerte. En otros casos, en cambio, los efectos tóxicos son leves y pueden ser lisérgicos, o sea, alucinógenos, por lo que su ingesta recreativa puede darse en algunas comunidades humanas.
No existe ninguna regla simple para distinguir los hongos venenosos de los comestibles.
  1. Ejemplos del reino fungi

Algunos ejemplos comunes de hongos son:

  • El hongo champiñón (Agaricusbisporus). cultivado en granjas y parte de la dieta regular de muchos países.
  • El hongo del pie de atleta (Trichophytonrubrum). una de las 42 especies de hongos parásitos que pueden infectar la piel humana, en esos casos en que se halla constantemente sometida a humedad.
  • El hongo pan de indio (Cyttariaharioti). una especie que parasita los troncos de los árboles del sur americano (Chile y Argentina), generando tumores o “nudos” amarillentos que obstruyen los conductos de la savia, así como frutos comestibles llamados “pan de indio”.
  • El hongo del maíz (Ustilagomaydis). llamado también huitlacoche o cuitlacoche, es un hongo que crece entre los granos del maíz, generando estructuras comestibles que en México y otros países se consideran un manjar.

Referencias: